MISIÓN...

"A los profesores y a las profesoras hay que formarlas para que, además de ser buenos enseñantes, sean también buenos tutores. La función tutorial se tiene que integrar en el rol docente, en la práctica educativa, en los procesos de enseñanza-aprendizaje. La tutoría implica una relación personal y bidireccional basada en el respeto, en el diálogo reflexivo, en el compromiso crítico para la definición de proyectos y la construcción de posibilidades y expectativas con sentido"

¿POR QUÉ ESTE BLOG?

En este blog se encontrarán ideas, experiencias, reflexiones, noticias... relacionados con l a enseñanza universitaria en general y, de man...

martes, 6 de octubre de 2020

COMIENZA EL DESARROLLO DEL PROGRAMA PIOFANI

Primera semana de clase en la Facultad y ponemos en práctica el Programa PIOFANI para el alumnado de nuevo ingreso. El lema del programa es LO IMPORTANTE NO ES LLEGAR, LO TRASCENDENTE ES MANTENERSE y constituye una propuesta de apoyo para que el nuevo alumnado se integre y comience a planificar el logro de sus objetivos académico-profesionales.

El programa se ha organizado en 8 sesiones de trabajo independientes y en cada una de ellas se aborda un aspecto concreto de interés para el alumnado en estos primeros pasos por la enseñanza universitaria. Desde conocer cómo se enseñanza y aprende en la universidad, los recursos para comunicarse con el profesorado, el funcionamiento de las aulas virtuales, la construcción del proyecto académico personal, los recursos de apoyo con los que cuenta para gestionar su proceso formativo o los recursos para la búsqueda de información, con el programa se quiere acompañar a los estudiantes, insistiendo en la importancia que tiene un buen comienzo. Hay comenzó la primera sesión y las sensaciones han sido muy positivas !!!

https://www.ull.es/portal/noticias/2020/educacion-disena-programa-orientacion-nuevo-ingreso/




domingo, 4 de octubre de 2020

ARTÍCULO: ADAPTABILIDAD A LOS ESTUDIOS UNIVERSITARIOS

En el último número de la Revista Iberoamericana de Educación Superior (número 32, volumen XI), se publicó el artículo "Competencias de adaptabilidad y factores de éxito académico del alumnado universitario"

En  este  artículo  se  analizan  los  factores  que  intervienen  en  la  transición,  adaptabilidad  y  éxito  en  la  formación universitaria. Con el estudio se pretendía identificar las características de los estudiantes bien adaptados y con buen rendimiento en la educación superior. Los datos recogidos a través de un cuestionario con una muestra de 208 estudiantes de 36 titulaciones universitarias, reflejaron que el rendimiento en las etapas previas es un factor determinante de la adaptabilidad. Los estudiantes de éxito mostraron metas claras, alta satisfacción con la titulación elegida, buen conocimiento del perfil profesional, constancia en el proceso de estudio, asistencia a clase, etcétera. La fijación de este perfil es importante como referente para la orientación al alumnado preuniversitario, para que desarrollen competencias de adaptabilidad y preparen el acceso a los estudios de grado.

Actualmente la RIES está indexada y forma parte del IRMCyT índice de Revistas Mexicanas de Investigación Científica y Tecnológica, Conacyt), de Scopus (la mayor base de resúmenes y referencias bibliográficas de literatura científica revisada por pares), SciELO Citation Index (que cuenta con un subconjunto en el Web of Science), RedALyC, REDIB (Red Iberoamericana de Innovación y Conocimiento Científico), AE Global Index, CLASE, Latindex e IRESIE.

https://www.ries.universia.unam.mx/index.php/ries/issue/view/38

domingo, 20 de septiembre de 2020

EL PROGRAMA PIOFANI, PARA EL ALUMNADO DE NUEVO INGRESO

Como coordinador del Servicio de Orientación (SOIA) y del Plan de tutorías (POAT) estamos preparando la llegada del nuevo alumnado que se incorpora a la Facultad de Educación. Este va a ser un año complicado y los estudiantes que accedan a la Facultad tienen que tener la mejor ayuda, el mejor apoyo y las mejores medidas de asesoramiento. Hemos establecido de manera coordinada una secuencia de actuaciones, que se inicia con las Jornadas de Bienvenida, continúa con el programa PIOFANI y se despliega luego a lo largo del curso con otros procesos de Orientación a través de las actuaciones del SOIA y del POAT de cada titulación. El modelo tiene que estar muy bien engrasado porque este año la Orientación y la tutoría tienen un papel importante y una misión clave que cumplir.


sábado, 5 de septiembre de 2020

COLABORACIÓN EN LIBRO SOBRE TUTORÍA UNIVERSITARIA

 

Colmenero, M.J. y Álvarez, P. (2020). La universidad como espacio inclusivo. En A. Pantoja (coord..), Buenas prácticas en la tutoría universitaria (pp. 39-58). Madrid: Síntesis

No es posible considerar una enseñanza de calidad que no sea inclusiva, que no tenga en cuenta los problemas, las necesidades de las personas que tienen más dificultades o mayores riesgos de exclusión. Al mismo tiempo, una educación que no sea inclusiva entra en confrontación con los derechos de justicia social que debe presidir y estar presente en cualquier planteamiento educativo (Agenda Educativa, 2030). La respuesta a la diversidad en la universidad y los procesos de atención al alumnado con discapacidad, ya sea a través de medidas integradas en el propio proceso formativo (distintos tipos de adaptación de la enseñanza en función de las características del alumnado), como las medidas extracurriculares (programas de Orientación e información, programas de tutoría, guías de recursos, etc.) tienen que partir de un estudio y un diagnóstico de las necesidades de cada estudiante. A lo largo del capítulo profundizaremos en los retos que supone introducir realmente en la enseñanza universitaria un enfoque inclusivo, analizaremos los problemas que encuentra el alumnado con discapacidad para transitar y adaptarse al contexto de la educación superior, revisaremos algunas normativas de referencia que pueden resultar de interés en relación a los derechos que tienen los estudiantes con discapacidad, recogeremos las necesidades del alumnado universitario con discapacidad y plantearemos algunas medidas de Orientación y tutoría que pueden resultar de interés para lograr una mejor inclusión del alumnado con discapacidad. Cerraremos el capítulo con dos casos prácticos en los que se ofrece una solución para lograr la inclusión. Asimismo, recogeremos diversas actividades y recursos de interés que puedan servir para que la enseñanza universitaria sea más inclusiva y adaptada a las necesidades de todo el alumnado.


viernes, 7 de agosto de 2020

GUÍA PRÁCTICA SOBRE EL DESARROLLO DE PROGRAMAS DE TUTORÍA (POAT) EN LA ULL

Esta guía es una aproximación al desarrollo práctico de los planes de Orientación y Acción tutorial (POAT) en la Universidad de La Laguna (ULL), centrando especialmente la atención en el modelo de la tutoría de carrera. La guía recoge el enfoque y el modelo POAT que se defiende desde el Vicerrectorado de Innovación Docente, Calidad y Campus Anchieta de la Universidad de la Laguna. En la guía y siguiendo un formato de preguntas frecuentes, tratamos de abordar algunos aspectos básicos para la implantación de los programas POAT y el desarrollo de actividades con el alumnado, incluyendo referencias y ejemplos prácticos. Son ideas y sugerencias para la práctica, que requerirán su adaptación a cada Centro y Facultad, en tanto que cada contexto y cada realidad es diferente, lo que exige respuestas adaptadas a las mismas.

https://riull.ull.es/xmlui/handle/915/20902


jueves, 23 de julio de 2020

COLABORACIÓN EN LIBRO SOBRE ABANDONO DE LOS ESTUDIOS

Álvarez, P., y Cabrera, L. (2020). Problemas psicoeducativos del alumnado universitario y respuestas al abandono desde un enfoque orientador integral y formativo. En A. Bernardo, E. Tuero, L. Almeida y J.C. Núñez (Comp.), Motivos y factores explicativos del abandono de los estudios. Claves y estrategias para superarlo (pp. 131-142) Madrid: Pirámide.

Sale a la luz un manual en el que se aborda el tema del abandono académico, uno de los grandes problemas al que desde hace mucho tiempo se enfrenta la Educación. Una obra coordinada por docentes de la Universidad de Oviedo y en el participamos con un capítulo titulado "Problemas psicoeducativos del alumnado universitario y respuestas al abandono desde un enfoque orientador integral y formativo"

Resumen
El abandono de los estudios ya sea en los niveles educativos tempranos o en niveles correspondientes a la educación superior, conlleva una serie de problemas e incertidumbres para los estudiantes implicados, así como para sus familias y la sociedad en la que viven. Las tensiones emocionales provocadas por esta situación repercuten en el desarrollo personal del alumno y pueden conducir a una deficiente integración social. Además, el abandono de los estudios afecta de forma negativa a la sociedad en la que esto se produce, ya que la falta de mano de obra cualificada en el tejido productivo y social influye en la calidad de vida y en el desarrollo de la sociedad. Por ello, el fenómeno del abandono está en el punto de mira de las instituciones educativas y de las instancias políticas de todo el mundo. Este manual se ha pensado y organizado para ayudar a los docentes y profesionales de la educación a comprender e intervenir ante el abandono de los estudios, con el ánimo de aportar algunas luces sobre este problema que nos afecta a todos.

Índice
Prólogo. Incidencia del abandono temprano. Comprender y prevenir el abandono escolar en Educación Secundaria Obligatoria. El papel protector de la familia y su influencia en las variables personales vinculadas al abandono temprano. El abandono temprano en formación profesional desde un enfoque de aprendizaje a lo largo de la vida. El rol docente y la interacción de aula para la promoción del compromiso escolar como estrategias de prevención del abandono temprano en estudiantes de secundaria. El fenómeno del abandono universitario. Abandono como proceso progresivo de desvinculación académica. Problemas psicoeducativos del alumnado universitario y respuestas al abandono desde un enfoque orientador integral y formativo. La motivación académica y su relación con el abandono universitario. Mapeando las razones del abandono de la educación superior en Brasil. Acoso escolar y digital. La deserción en MOOC. Pensamiento crítico y bienestar como prevención del abandono de los estudios.

viernes, 3 de julio de 2020

LA ULL REVALORIZA LA FUNCIÓN TUTORIAL

Seminario virtual en el que se trató el tema de los Planes de Orientación y Acción Tutorial en la Universidad de La Laguna, situándolo en el contexto actual y pensando en la situación de comienzo del próximo curso. La figura del tutor de carrera, como referente, guía de aprendizaje, acompañante, amigo crítico, etc. va a ser fundamental para ayudar a los estudiantes de nuevo ingreso a adaptarse al nuevo contexto.

Enlace al Webinar:

https://youtu.be/VqmdVkgluXs

viernes, 26 de junio de 2020

LOS PLANES DE ORIENTACIÓN Y TUTORÍA (POAT) EN LA ULL: NUEVOS PLANTEAMIENTOS Y DIRECTRICES

La finalidad de este Webinar en el que participamos es ofrecer algunas orientaciones que faciliten la organización de los Planes de Orientación y Tutoría en el curso 2020-2021. También se pretende clarificar el modelo POAT de partida y algunas dudas sobre el proceso a seguir en los diferentes centros. Además, favorecer la reflexión entre todas/os los participantes, profesionales interesados y vinculados al desarrollo del POAT, sobre las contribuciones que se pueden hacer desde este espacio para facilitar la integración y el proceso formativo del alumnado universitario.
Tenemos un reto importante en el próximo curso, porque estamos en un momento complejo en el que la tutoría y la atención al alumnado es clave. Los estudiantes de nuevo ingreso ha tenido un curso y un final de curso complejo, no han recibido la Orientación adecuada y su aterrizaje en la Universidad va a ser complejo. Por eso hay que reforzar los Planes de Tutoría y las medidas de apoyo al alumnado. No valen las recetas, sino los planes de actuación orientadora innovadores y contextualizados, que fomenten el desarrollo de estudiantes autónomos y comprometidos con sus proyectos personales y colectivos.

https://www.ull.es/portal/noticias/2020/la-ull-organiza-un-seminario-para-analizar-los-planes-de-tutorizacion-del-proximo-curso/

jueves, 25 de junio de 2020

LOS PROS Y CONTRAS DE LA EVALUACIÓN CONTINUA


La situación que se ha vivido en el tramo final del curso 2019-2020 y la defensa de un modelo de enseñanza centrado en el estudiante, como enfoque más demandado desde la  implantación del EEES, ha avivado de nuevo la controversia en torno los pros y los contras de la evaluación continua en la enseñanza universitaria. El problema es complejo, porque integra una gran diversidad de factores (enfoques de la enseñanza, modelos de evaluación, contexto de aprendizaje, etc.). Siendo un problema complejo, la solución no es simple, porque no admite una sola solución, sino distintas respuestas. A mí me parece que hay que partir de lo que cada uno entiende por “enseñar”, por “aprender” y como valorar dicho “aprendizaje”. Ciertamente, si yo me sitúo en el contexto de la enseñanza universitaria y pienso en el modelo ideal, la opción preferente es un modelo de enseñanza constructivo (o constructivista) pensado para que el estudiante aprenda, de ahí que yo hago tanto trabajo fuera del aula, en el propio espacio que comparto presencialmente con el alumnado y después del trabajo presencial (el ciclo del aprendizaje debe contemplar diversas fases y momentos y en cada una de ellas el docente desempeña diferentes tareas. El trabajo va encaminado a activar la capacidad de aprender, ofreciendo al alumnado los recursos formativos para que se produzca el aprendizaje. Por tanto, en primer lugar, la labor del docente es más la de un guía del aprendizaje que la de un transmisor de los mismos; el que aprende es el alumno/a y el docente facilita el aprendizaje. Por eso defiendo una formación centrada en el estudiante, no en el profesor, que es un facilitador, no el único “recurso”. El segundo elemento clave es cómo valorar ese aprendizaje. Para un modelo de enseñanza de estas características, sin duda el enfoque de evaluación ideal sería una evaluación continua y formativa; la evaluación no sirve solo para determinar la cantidad de conocimiento adquirido, sino para más cosas, de ahí que sea al mismo tiempo una evaluación diagnóstica, porque debe servir para mejorar el aprendizaje si se comprueba que el estudiante tiene dificultades. Y el tercer elemento, es el contexto del aprendizaje. Obviamente, la evaluación formativa, como modelo ideal choca con las condiciones en las que se desarrolla la formación universitaria. Un modelo de evaluación formativa y continua como el apuntado, en el que se va llevando a cabo una interacción continua entre profesor-alumno, en el que se supervisa el proceso de aprendizaje de cada uno, en el que se atiende de manera personalizada y tutela el aprendizaje… exige condiciones que no siempre se tienen. En una clase en la que hay matriculados más de 75 estudiantes es muy complicado aplicar una metodología de esta naturaleza, porque generalmente el docente tiene diversas asignaturas y no hay tiempo material para hacer este trabajo de organizar la enseñanza, dinamizar el aprendizaje y valorar el trabajo del estudiante (mediante la supervisión y valoración de diferentes tareas, que revisa, devuelve, asesora a cada uno sobre lo que debe mejorar…). Entonces, la solución hay que encontrarla en adaptarse al contexto de condiciones para el aprendizaje, sin perder la esencia del modelo de evaluación formativa, combinando diferentes estrategias individuales y grupales. Por ejemplo el modelo de portafolios o la enseñanza/clase invertida en la que se trabaja fuera del aula y luego se utiliza el tiempo de clase para llevar a cabo actividades que impliquen el desarrollo de procesos cognitivos de mayor complejidad que tienen lugar con el asesoramiento del docente.

martes, 16 de junio de 2020

EL TERRIBLE DILEMA DE EVALUAR


En este tiempo estamos inmersos en el proceso de evaluación… revisar, corregir, valorar, calificar…son los términos que estos días más se repiten entre la clase obrera docente; horas y horas interminables de un proceso que, a mi particularmente, me deja insatisfecho. Se me acumulan un montón se sentimientos diariamente cuando me enfrento, como en estos días, a la evaluación. Es como una especie de guerra entre dos bandos, cuyos resultados no dejan indiferentes ni a unos ni a otros. Yo defiendo e intento promover un modelo de enseñanza donde los estudiantes tengan protagonismo, se impliquen en su aprendizaje y aunque lo consigo en algunos casos, lo cual se refleja en el compromiso y las elaboraciones que me entregan, en otros, la sensación es terrible. Así que en muchos casos me veo en medio de una tarea en el que el rol que tengo que desempeñar es más de policía académica científica, que la de docente universitario. Y con los que saben a lo que vienen a la universidad, están atentos a los mensajes, tienen una buena intensidad en el trabajo y en el compromiso académico, cumplen con el patrón de un estudiante integrado al proceso formativo, etc. la evaluación te lleva a valorar en qué medida el trabajo que han realizado ha sido satisfactorio y les ha permitido alcanzar las competencias que estaban en juego. Eso ya se nota en el mismo proceso de seguimiento. Pero con los otros, que tienen como objetivo pasar por la universidad de puntillas, empleando el mínimo esfuerzo, utilizando estrategias para aprobar y no para aprender, la sensación es insufrible. Haces un esfuerzo tremendo para que les llegue el mensaje, pones todos los medios para que se impliquen, estás siempre con el deseo de que te sorprendan positivamente, pero muchas veces el muro que levantan es infranqueable. Y cuando llega la evaluación, el acercamiento que tienen es para presentarse el día de la revisión y decir eso de “vengo a ver el examen”. A ver el examen... y podría ser interesante si el fin fuera, "vengo a ver en qué he fallado para mejorar y voy a aprovechar toda la ayuda que me da el profesorado". Pero no siempre es así; muchas veces el encuentro se conduce por el regateo, para ver si consiguen que el profesor cambie su criterio y le ponga un aprobado, aunque no tenga ni idea de que va el asunto. Por eso me pregunto muchas veces, ¿a qué habrán venido muchos estudiantes a la Universidad?

lunes, 25 de mayo de 2020

COLABORACIÓN: LAS COMPETENCIAS EMOCIONALES: FACTOR PROTECTOR ANTE LOS CAMBIOS EN LA FORMACIÓN UNIVERSITARIA (Núria Pérez Escoda, UB)


Nuria es una persona a la que aprecio mucho y con la que he compartido muchos momentos en el trabajo que venimos haciendo en la Red Interuniversitaria de Profesorado de Orientación (RIPO). Es profesora titular en la Universidad de Barcelona y su especialidad es el campo de la Educación Emocional y el desarrollo de competencias emocionales, donde se ha convertido en un importante referente. La situación que vivimos actualmente en la enseñanza universitaria pone en primer plano la importancia de saber manejar situaciones complejas. Por este motivo le he pedido a Nuria que nos aporte algunas de sus ideas, para afrontar los cambios que se vienen sucediendo en este tiempo y poder mejorar nuestra salud emocional.

En una de las anteriores entradas al blog se señalaba el agotamiento académico y emocional como efecto colateral de la pandemia. Efectivamente, el cambio brusco a la no presencialidad en la recta final del curso ha requerido una rápida adaptación (tanto del estudiantado como del profesorado) con una alta exigencia emocional. En esta situación, la capacidad de comprender y gestionar lo que nos ocurre, emerge como un factor protector que permite paliar males mayores. Darse cuenta de que cada uno puede mejorar su vivencia de forma voluntaria es una gran ayuda. No cambiará las circunstancias, pero si la forma en que las viva y consecuentemente las decisiones que pueda tomar a partir de ello. Es recomendable tomarse un tiempo para reflexionar y explorar que emociones nos embargan: miedo, rabia, tristeza, angustia, impotencia, ansiedad, etc. Es comprensible que cada uno sienta emociones diferentes ante la misma situación. Lo importante es acoger lo que se siente como algo natural y humano, es la propia reacción emocional. Comprenderla permite su gestión. Para ello, la conducta que se derive de lo que se siente no puede ser improvisada, irreflexiva o irracional o muy probablemente se complicará la situación. Preguntarse ¿cómo me quiero sentir? puede ser una buena estrategia para orientar las acciones futuras. Seguidamente se puede pensar en aquello que puedo hacer para sentirme como deseo. Dicho así parece fácil, pero en lo cotidiano hace falta mucha constancia y voluntad, es necesario perseverar en el logro de los objetivos, a pesar de las dificultades, y ser capaces de diferir recompensas inmediatas en favor de otras más a largo plazo. Se trata de cambiar la perspectiva de la situación desde una óptica negativa y victimista a otra positiva y de progreso, se trata de darse la oportunidad de descubrir las propias fortalezas, de cuidarse y cuidar a los demás, de adoptar una actitud positiva ante la vida; de proporcionarse objetivos esperanzadores, de valorar y tomar nota de los gestos de solidaridad, generosidad y gratitud que han emergido en nuestra sociedad ante la pandemia. En los momentos de agotamiento y pedida de confianza conviene ser activos y compensarse emocionalmente, darse permiso para tener momentos para disfrutar y sentirse bien como, por ejemplo: practicar la relajación, visualizaciones positivas, el ejercicio físico, ejercitar el pensamiento positivo, escuchar música, etc. Nuestra adaptación al cambio ha sido dura y repentina, pero el ser humano tiene recursos más que suficientes para salir adelante fortalecido con nuevos aprendizajes. Todos estamos aprendiendo mucho en esta situación.

Núria Pérez Escoda, Departamento de Métodos de Investigación
 y Diagnóstico en Educación, Universidad de Barcelona.

domingo, 24 de mayo de 2020

¿AFECTARÁ LA PANDEMIA AL ABANDONO EDUCATIVO?


En un Informe de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), se señala que el impacto por el cierre de los centros escolares en España podría ser de hasta el 3% de la desviación estándar. Esto puede suponer que cada estudiante puede llegar a perder hasta un 11% de lo que se aprende normalmente en un curso, debido al cierre de los centros y la supresión de la enseñanza presencial. Los autores del informe concluyen que habría que priorizar los contenidos para reducir la incidencia en la calidad de la formación y en el aprendizaje que logre el alumnado. Respecto al impacto que puede tener en el retraso y abandono, señala uno de los autores que los datos indican que el cierre de los colegios puede afectar especialmente a los que tienen mayores dificultades y van más rezagados. Esta realidad se agrava por el efecto de otros factores paralelos como el mismo estrés de los padres, las dificultades para acceder a internet, la situación económica, etc. Se proponen medidas para hacer frente a esta situación, como ampliar los programas de Orientación, Refuerzo y Apoyo al alumnado, para atender sobre todo a los estudiantes mayores necesitados y una atención más personalizada de los estudiantes en función de sus necesidades.

miércoles, 20 de mayo de 2020

EFECTOS COLATERALES DE LA PANDEMIA: EL AGOTAMIENTO ACADÉMICO DEL ALUMNADO


El cambio brusco que se ha tenido que dar en la enseñanza universitaria para protegernos de los efectos del COVID19, pasando a una modalidad de enseñanza totalmente virtual, está generando problemas considerables en el alumnado (también en el profesorado). Problemas que están asociados a estados de ansiedad, estrés, insomnio, etc. como consecuencia de la preocupación, incertidumbre y tensión que está provocando esta situación y el hecho de tener que hacer frente a nuevos procedimientos, nuevos requerimientos, nuevas metodologías, nuevas cargas de trabajo, etc. Todo esto se ha visto agravado por la exigencia de tener que hacer frente a esta nueva realidad desde la soledad y el aislamiento, sin el apoyo y el respaldo que aportan el clima del aula, el refuerzo de compañeros y tutores, etc. que si tenían durante la presencialidad. El efecto se está dejando sentir en los estudiantes que ya tenían dificultades con sus estudios, pero también en los alumnos y alumnas brillantes, que como consecuencia de todo esto y otro tipo de problemas vinculados a la brecha digital o a la situación económica, están teniendo dificultades para centrarse y rendir con eficacia. Ha empezado a aparecer un problema de agotamiento académico y de pérdida de confianza en la capacidad de hacer bien su trabajo como estudiantes. En el horizonte está la preocupación por los resultados académicos de las próximas convocatorias e, incluso, el riesgo de abandono de los estudios.


sábado, 16 de mayo de 2020

ORGANIZACIÓN DOCENTE PARA LA DESESCALADA ACADÉMICA


El comienzo del próximo curso académico se ha convertido en un quebradero de cabeza, no solo por la incertidumbre que hay acerca de cómo va a evolucionar la pandemia en los próximos días, semanas y meses, sino por la complejidad que supone en este caso los cambios organizativos que será necesario aplicar en la enseñanza. Las medidas de distanciamiento social tropiezan con la dificultad del espacio disponible para desarrollar actividades presenciales y la división de grupos choca con el inconveniente del profesorado que se necesitaría para adoptar esta medida. En la enseñanza universitaria, por poner un ejemplo de una Facultad concreta, pasar de grupos de 80 estudiantes a grupos de 40 (aunque sigue siendo una cifra excesiva), supondría un incremento considerable: de 168 grupos a 336, imposible de asumir. Así que se sigue pensando en estrategias organizativas para resolver este importante problema. 
Lo que sí está claro es que, en el mejor de los casos, habrá que recurrir a una limitación considerable de la enseñanza presencial y habrá que reforzar mucho más la telepresencialidad. En algunas comunidades han empezado a lanzar propuestas para todos los niveles educativos. La Voz de Asturias publicaba estos días la noticia de que en esa comunidad se baraja la posibilidad de que la reanudación de la actividad lectiva en los centros educativos no universitarios al comienzo del próximo curso, será presencial, en todo lo que sea posible, combinándola con la docencia a través de internet, sin que se lleven a cabo de manera simultánea. Señalan específicamente que «No se trata de que el profesorado atienda simultáneamente al alumnado que esté en el aula y al que esté en casa». Se han inspirado al pensar en esta medida en el modelo austriaco, donde los estudiantes acuden al centro una semana de forma presencial y trabajan desde casa las dos siguientes. 
En el ámbito de la educación superior hay que prepararse también para la desescalada académica y habrá que pensar e hilar muy fino para ver cómo se organiza la vuelta. Desde un modelo de aprendizaje basado en el estudiante, será preciso reducir la presencialidad (no renunciar a una presencialidad controlada es fundamental en cualquier modelo de enseñanza), reforzar el trabajo de tutoría y seguimiento del proceso formativo y acompañar al estudiante en el proceso de trabajo autónomo. Todas esas tareas del profesorado tienen que ajustarse y caber en las horas de trabajo que corresponden a su rol y ejercicio profesional. Así que no es una semana de clase y dos semanas en las que trabajan los estudiantes. El profesorado debe estar en el trabajo presencial y en el no presencial, como guía, acompañante y supervisor del proceso de aprendizaje del alumnado.
                                                                  


jueves, 14 de mayo de 2020

VERSIÓN ONLINE DEL ENCUENTRO ANUAL DE LA RED RIPO DE ORIENTACIÓN


Afrontar los momentos complejos que estamos viendo es un reto y un objetivo de todas las personas que nos movemos y trabajamos en el campo de la Orientación Educativa y Profesional. Siempre, pero quizás más en estos momentos de incertidumbre y de adaptaciones, la intervención orientadora y tutorial es un recurso reconocido e indispensable para ayudar a cada uno a encontrar salida a sus intereses, situaciones y expectativas. Ayudar a situarse en la realidad, valorar-nos y proyectar con responsabilidad soluciones desde la iniciativa, la implicación y el compromiso.
Todas estas inquietudes por consolidar el campo de la Orientación, por la necesidad de poner en común cómo nos imaginamos la Orientación, lo que ha sido y lo que es, fue lo que propició que en el año 2009 un grupo de profesoras y profesoras universitarias que trabajábamos en el ámbito de la Orientación, decidiéramos crear la Red Interuniversitaria de profesorado de Orientación (RIPO). Cada año nos reunimos en una Universidad diferente y valoramos distintas cuestiones en relación a los ejes básicos sobre los que se asienta esta disciplina, con la intención de valorar y reflexionar, para proyectarnos en colaboración desde una visión compartida.
El trabajo que se ha desarrollado en todos estos años de andadura (11 años ya desde el primer encuentro en Barcelona), nos da una perspectiva real de la trayectoria individual y colectiva que se ha seguido, de las posibilidades reales, de los inconvenientes, de la identidad y las peculiaridades de esta Red y de los retos que nos planteamos de cara al futuro.
Este año el encuentro anual (RIPO XI) estaba previsto que se celebrara en Donosti, pero las circunstancias que ha traído consigo el COVID-19 no lo han permitido. Sin embargo, no por ello hemos dejado de encontrarnos, de otra manera, sin la proximidad y la afectividad que siempre rodean los encuentros de la Red RIPO, pero no por ello menos interesante y revitalizante. La compañera Rakel del Frago ha logrado contagiar el entusiasmo por acudir a esta cita virtual y esta mañana del día 14 de mayo, hemos estado virtualmente en comunicación. Nos hemos vuelto a unir, nos hemos vuelto a reconocer, nos hemos vuelto a emocionar y nos hemos vuelto a dar cuenta del papel tan importante que juega la Orientación Educativa y Profesional. La presentación de las líneas de trabajo para este encuentro, que sin duda se podrá celebrar en toda su extensión cuando sea posible, ha sido un adelanto de interesantes debates en torno a problemas y temas claves de la Orientación. El mensaje con el que nos debemos quedar es que la Orientación sigue despertando interés, porque tiene mucho que aportar en la mejora de los problemas sociales en general, que la Red RIPO sigue estando viva y que unidos vamos a seguir construyendo este camino.

martes, 12 de mayo de 2020

COLABORACIÓN: ¿CÓMO ENFRENTAR EL NUEVO ESCENARIO FORMATIVO?: REFLEXIONES DE UNA ALUMNA DE EDUCACIÓN (Berta Pisaca, ULL)


Uno de los protagonistas importantes de este proceso de adaptación de la enseñanza que estamos realizando en la Universidad es el alumnado. Son muchos los relatos de miles de alumnos y alumnas que en este tiempo han tenido que enfrentarse, cada uno desde su realidad, desde sus condiciones, desde sus posibilidades y limitaciones a este proceso de cambio. Así que nos hemos querido acercar al alumnado para conocer cómo  están viviendo este proceso, cómo afrontan las dificultades y qué soluciones proponen para encaminar este proceso de manera constructiva. Y contamos con la aportación de Berta Pisaca, una alumna de referencia en la Facultad de Educación, estudiante de último curso, presidenta de la Delegación del alumnado. Ella nos cuenta sus impresiones sobre este proceso de adaptación que estamos recorriendo todos y todas, en este caso, desde la perspectiva del alumnado.


He sido una de las muchas personas que han tenido que redirigir la enseñanza presencial a un aprendizaje más autónomo, más autodidacta y, por tanto, más firme y perseverante. Lo que durante la carrera se convirtió en una rutina que consistía en subir de Santa Cruz a la Laguna en hora punta y con prisas, pasó a un mirar de reojo el escritorio con pocas ganas, preparar un espacio para estar cómoda, respirar hondo y decir ¡Vamos!. No me había dado cuenta hasta ahora de tantas cosas que hacía de manera automatizada y sin pestañear, ya que era lo que tocaba en ese momento (la entrega de un trabajo, estudiar para un examen parcial, etc.). Ahora, al no existir una presencialidad, una enseñanza continuada, todo se ve reducido y, en muchos casos, lo más humano que tenemos de la enseñanza es una "voz en off" que te narra el contenido de las clases.
Por eso creo que ahora mismo, cada persona ha de marcar su propia estructura de trabajo, ha de marcarse unos horarios, un lugar de estudio que le resulte favorecedor y se sienta a gusto. Además, tiene que disponer de otro tipo de materiales o herramientas y poner de su parte. Es importante ser constante, porque ahora ha aumentado la carga de trabajo. Si cualquier alumno/a de la Facultad, no es capaz de gestionarse bien el tiempo y afrontar de manera asertiva esta situación, es complicado, muy difícil continuar con el trabajo que se hacía en una enseñanza presencial. Será muy costoso y complejo también llegar a establecer un vínculo con lo que cada uno espera de sí mismo, en un futuro no tan mediato. Me refiero a que, por ejemplo, un alumno/a de primero, independientemente del grado al que pertenezca, se ha tenido que enfrentar con materias y contenidos bien distintos a lo que había estudiado antes, un trato más distante quizás con el profesorado, unos plazos de entrega más prolongados en el tiempo y un seguimiento de su aprendizaje que ha de ser cuestionado por sí mismo. Si este alumnado no es constante en este tiempo y con estas situaciones, posiblemente se desmotive y comience la cuenta atrás para que piense que no es capaz de superar el curso académico o incluso, pueda decidir abandonar la Universidad "porque no es para él/ella".
A partir de ahora lo único que puedo decir es que hay que seguir reinventándose y buscar mayor número de soluciones, que nos hagan partícipe a toda la comunidad universitaria y no velar solo por los propios intereses. Saber que existen infinidad de herramientas para establecer una comunicación eficaz. Y que si alguien no había sentido interés por estas herramientas, esto no quiere decir que no resulten necesarias. Y en relación a esto resaltar que nos enfrentamos a un problema importante en este momento, el gran inconveniente de la “brecha digital”. Ahora es el momento en el que te das cuenta de que con lo que antes te apañabas en casa, ahora tienes limitaciones o en ocasiones ha ocurrido que ni si quiera por cuenta propia disponías de un ordenador o si así lo fuese, podrías no tener conexión a Internet, te percatas de que actualmente no todo el mundo dispone de los recursos tecnológicos y habilidades informáticas a pesar de tener un teléfono móvil.
Es cuestión de sumar y de restar y en esta situación nadie puede perder, ni ganar. Seas lo que seas, sé empático, se solidario, sé la mejor versión de ti misma". ¿Será posible?
Berta Susana Pisaca Tierra
Alumna del Grado de Pedagogía
Facultad de Educación, ULL